El potencial del deporte para cumplir los ODS
El deporte tiene una gran relevancia social. Su capacidad para mover a las masas y hacer que estas se unan está más que demostrada. Es un fenómeno social que debe enfocarse y aprovecharse en beneficio de los objetivos de desarrollo sostenible marcados en la Agenda 2030.
La responsabilidad social corporativa (RSC) en entidades deportivas
A pie de calle, el deporte une a las personas. El fundamento de la gran mayoría de las disciplinas se fundamenta en el respeto al adversario y fomenta le trabajo en equipo.
Niños de distintas edades y sexos se unen para poder disputar un partido aficionado dejando atrás cualquier diferencia. En este sentido, tiene una vinculación directa con el objetivo 5, sobre la igualdad de género.
Cuando las escuelas organizan actividades extraescolares deportivas, se realizan competiciones amistosas en el mismo recinto y con otros centros educativos. Esto fomenta la convivencia y las diferencias tienden a desaparecer
Es innegable que cualquier actividad física, incluso practicada en solitario, beneficia la salud personal logrando que el organismo funcione mejor, que se desarrolle la resistencia física, que se active y se segreguen una serie de sustancias hormonales con impacto positivo sobre cuerpo y mente. Es innegable su estrecha relación con el objetivo 3 de salud y bienestar.
Gobiernos y ONGs articulan diversos recursos para que las diferencias económicas no afecten a la hora de aprender o practicar un deporte. Incluso se otorgan becas de estudios para los que destacan en la práctica de cualquier categoría deportiva. De esta manera, personas con una economía débil pueden recibir estudios de calidad.
A nivel profesional se suman todas las ventajas de la práctica deportiva con la atención incondicional de las masas. Independientemente de la afición a ciertos deportes que llegan a considerarse un culto en muchos países, como es el caso del fútbol o el baloncesto, los mundiales o las olimpiadas abarcan a más público.
Esa atención global es un momento ideal para concienciar sobre la igualdad, la necesidad de cumplir las ODS para una futuro mejor a nivel mundial y una ocasión inmejorable para poner en práctica las estrategias RSC para fomentar todo esto.
Los clubs de prestigio crean escuelas deportivas en los países subdesarrollados dando la oportunidad a miles de niños de recibir una educación.
Por supuesto, hay que sumar que el tirón mediático de las estrellas deportivas convierte a esta élite en figuras de respeto que pueden promover todo esto para concienciar a la población mundial en todos los niveles. Si estas estrellas representativas validan la calidad de un producto o apoyan una campaña política, también pueden fomentar el reciclaje, el cuidado del medio ambiente, la igualdad y el respeto entre las masas, fines perseguidos por varios objetivos de desarrollo sostenible. Realmente el deporte, de una manera u otra puede acabar influyendo en todos los ODS.
Todavía queda mucho camino para cumplir con la Agenda 2030 y sin la responsabilidad social corporativa será más difícil. Por este motivo hemos creado DoGood People, para ayudar a cualquier tipo de entidad a trabajar con metas sencillas para ir poco a poco cambiando el mundo y que nadie quede atrás. Más información aquí.