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CSRD y materialidad no financiera

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Si bien las empresas han estado expuestas durante mucho tiempo a la materialidad financiera y la gestión de los riesgos económicos para los accionistas, la nueva CSRD pondrá la materialidad no financiera al frente de los informes de las empresas.

Por lo general, la materialidad ha sido una herramienta para juzgar el impacto que un determinado riesgo u oportunidad empresarial puede tener en una empresa y sus accionistas, centrándose casi exclusivamente en los términos financieros para redactar los informes de la empresa.

La nueva Directiva sobre Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD, por sus siglas en inglés) tiene como objetivo dar un paso más y alinear la materialidad con la sostenibilidad. Es decir, las empresas tendrán que evaluar los riesgos y oportunidades derivados de cosas como la vulnerabilidad del negocio frente al cambio climático o, por el contrario, la contribución de la organización al mismo.

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Y mientras que para algunas empresas la materialidad no financiera y las premisas establecidas en el esfuerzo más reciente de Europa para crear un entorno empresarial sostenible no son nuevas, para muchas otras, estas nuevas reglas tienen implicaciones nuevas e importantes, así que profundicemos.

¿Qué es la materialidad no financiera?

Como hemos explicado antes, la materialidad no financiera no es un concepto nuevo, y muchas empresas ya están familiarizadas con ello. Se refiere a los riesgos y oportunidades relacionados con la sostenibilidad que las empresas optan por incluir en sus informes corporativos en función del impacto que tienen en las decisiones de los usuarios.

Sin embargo, las organizaciones que lo hacen, trabajan de forma voluntaria siguiendo estándares de reporte como GRI (Global Reporting Initiative). Pero los reguladores de la UE están cambiando las tornas para hacer que la materialidad no financiera y la evaluación de los riesgos de sostenibilidad sean obligatorias.

CSRD and materiality

De hecho, la última Regulación de Divulgación de Finanzas Sostenibles (SFDR) ya obliga a los inversores a considerar los riesgos materiales de sostenibilidad, lo que a su vez hace que las empresas estén más abiertas a ofrecer dicha información.

¿Qué pasa con la doble materialidad?

Una de las principales características que definen la CSRD, y que la diferencian de esfuerzos anteriores de elaboración de informes de sostenibilidad, es precisamente la inclusión de la doble materialidad.

La doble materialidad implica una doble evaluación en la que las empresas no solo analizan la sostenibilidad o los problemas no financieros que pueden generar riesgos para sus actividades, sino también el impacto que la empresa en sí misma tiene en la sociedad y el medio ambiente.

Involucra a los empleados en la estrategia de sostenibilidad

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La materialidad no financiera, incluida la doble materialidad, es el medio por el cual las empresas pueden reconocer el alcance del impacto de sus actividades más allá de los términos financieros o monetarios, que tradicionalmente y principalmente preocupan a los inversores.

En este sentido, la doble materialidad tiene en cuenta a los grupos de interés, desde empleados hasta proveedores, clientes y la comunidad en general en la que operan.

¿Cómo pueden las empresas abordar la materialidad no financiera?

Los informes corporativos han sido obligatorios durante mucho tiempo en algunos aspectos, pero nunca antes habían sido tan relevantes a la hora de evaluar los riesgos no financieros y de sostenibilidad para inversores, gobiernos, sociedad y una amplia variedad de partes interesadas internas y externas.

CSRD and materiality

Los riesgos no financieros o de sostenibilidad pueden abarcar desde la estrategia de la empresa hasta su reputación y desempeño. Pero, ¿cómo pueden las empresas abordar un esfuerzo tan ambicioso? Estos son algunos pasos clave a tener en cuenta al abordar la doble materialidad y los informes no financieros alineados con CSRD:

  • Comunicación abierta, directa y regular con los grupos de interés. Uno de los aspectos clave de los análisis de materialidad es evaluar qué riesgos los stakeholders encuentran más relevantes y contrastarlos con las prioridades del negocio.
  • Evaluar en el largo plazo. Uno de los temas más destacados en las evaluaciones no financieras es el cambio climático y sus efectos, por lo tanto, para poder analizar adecuadamente los impactos de los riesgos climáticos para y por las actividades de la empresa es necesario mirar a corto, medio y largo plazo.
  • Buscar formas de generar datos relevantes. Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las empresas al evaluar la información no financiera es la falta de datos relevantes sobre cuestiones como la gestión de los empleados, los derechos humanos o los factores de gobernanza. Todos los cuales son cruciales para comprender los riesgos materiales de los grupos de interés.
CSRD and materiality

Involucra a los empleados en la estrategia de sostenibilidad

La gestión de los empleados es parte de una evaluación eficiente de la materialidad no financiera y, además, ellos mismos deberían ser una parte activa y central de los esfuerzos de las empresas para mejorar las estrategias de sostenibilidad y, en consecuencia, los informes de sostenibilidad.

Es en este contexto que creemos que la sostenibilidad no puede ser cosa de un solo departamento o una sola política, solo es efectiva y productiva cuando la integramos en toda la empresa, en el corazón de los empleados y otros grupos de interés relevantes.

Con nuestra tecnología ayudamos a las empresas a establecer objetivos de impacto ESG para los empleados en relación con la estrategia de sostenibilidad de la empresa. Podemos activar y trazar el impacto de los empleados, creando un compromiso que se traduce en mejores métricas ESG, valor de reputación y un impacto positivo general para el medio ambiente y la sociedad.